María del Rosario Jiménez Hidalgo, ve la luz y nace para la vida y el flamenco (que a la postre sería su vida), en la mariana ciudad de Sevilla, un 17 de mayo de 1962, aunque sus padres quieren que sea su pueblo, quien la acoja como hija y es bautizada en Mairena del Alcor.

Hija de padre cantaor y madre profesora de piano, buena cuna, si señor; desde muy pequeña duerme al calor del cante por nanas y tonás de su padre y al susurro melódico del pentagrama musical y de piano de su noble madre.

Canta y baila, pues le viene de cuna, la música y la bata de cola son el patio de los juegos de su niñez.

Contaba con diez añitos cuando en una reunión de flamencos Antonio Cruz García Don Antonio Mairena (amigo personal de Diego, su padre querido), la ve bailar y observa cualidades y estilo en esta niña, que apenas alzaba los bracitos, pero con un estilo, y unas maneras que Antonio recomienda a su padre que la inicie en estudios de flamenco, que la ponga en manos de su gran amiga y profesora Matilde Coral. Y como no?, casi de inmediato es recibida y entra en la Escuela de Matilde Coral. Allí curso estudios de baile combinándolos con sus estudios de bachiller y Cou. Se diploma  en Puericultura y Educación Especial con niños sordomudos, síndrome daown y autistas, gran acierto pues con el tiempo le sería de la valía estos conocimientos para el trato con sus discípulos.

El flamenco lo recibe en primer lugar de su querido padre Diego Jiménez, pero pasa por las  clases entre otros de Matilde Coral, Rafael el Negro, El Mimbre, Manolo Marín, José Galván, sin olvidar la música de su madre y profesora, 

Se siente fiel seguidora de la “Escuela Sevillana de Flamenco” y  lleva el nombre de Mairena del Alcor por los numerosos rincones del mundo que recorre en sus actuaciones.

Citar las notas de prensa de las actuaciones y países donde su baile ha sido el deleite del público, sería quizás un poco cansino, pero sirvan estas leves pinceladas como muestras del arte y del éxito conseguido.

En  E.E.U.U la crítica entre otro elogios, dijo de ella: -Cuando Rosario alza sus brazos y sus manos caracolean el aire en la majestuosidad de su baile, estas se transforman en palomas llenas de duendes y compás-.

En Francia la crítica especializada dijo: “En Rosario y su compañía flamenca se ve notablemente el sello y la pureza de la Escuela Sevillana Flamenca”.

Sus actuaciones, como pueden suponer, pasan por casi todas las peñas y muchos de los festivales flamencos de la provincia de Sevilla y de Andalucía.

Las grandes ciudades españolas no se han perdido su arte, así baila en Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia, y etc. etc. . . . .

Su taconeo suena y resuena, pisa los escenarios como resalto renglones atrás, fuera de las fronteras españolas, y va desde países cercanos como Francia,  Portugal o Marruecos a pasar por Italia, E. E. U. U., Ottawa, Montreal, Japón,..

Ha colaborado y trabajado de coreógrafa del ballet de cabecera del “Riá Pitá”, programa de Canal Sur TV durante 12 emisión televisiva.

Su faceta de mujer flamenca donde las haya, la ha llevado a formar parte de la Junta Directiva de la Casa del Arte Flamenco Antonio Mairena durante un buen número de años, además de haber creando para ésta Casa un “Cuadro Flamenco”.

Posee además de una Academia de Baile Flamenco y Danza Clásica un Cuadro Flamenco y de Ballet.

Actualmente combina la enseñanza en su escuela de baile con las actuaciones personales y la de su Ballet Flamenco.

Su experiencia en el mundo de la docencia flamenca es larga y prolifera, vasta recordar que en 1.996 inauguro su nueva Escuela de Baile, escuela que se encuentra  en la calle Avicebron, 3 de Mairena del Alcor, desde aquel año hasta hoy.

A grandes rasgos, este es el currículo de una mujer flamenca, guapa, esposa y madre, que lleva con orgullo y gala el arte singular de nuestra tierra, el flamenco, y dentro del mismo EL BAILE, tu  baile Rosario.